"¿Quién no habla de un asunto muy importante, muriendo de costumbre y llorando de oído?"

"¿Quién no habla de un asunto muy importante, muriendo de costumbre y llorando de oído?"
S. Choabert

lunes, 19 de noviembre de 2012

Leche caliente


Con el vaso de leche caliente entre las manos, templo el semblante mientras miro el mar de nubes que se abre por encima del resquicio de la persiana. Sobre la mesa, el tarro de miel se ilumina con el reflejo de los primeros rayos de sol y el eminente resfriado del otoño progresa hasta el promontorio de los alcores de mi cabeza. Hilando la miel caldeada, introduzco la cuchara pajiza en el vaso níveo a la vez que la hago girar con presteza en el ínterin de producirse la nueva mezcla portentosa. Bebo a sorbos cortos la crema candente al tiempo que alzo los ojos e imagino la inutilidad del decreto aprobado sobre la Ley de protección de los desahuciados: "una familia con una renta inferior a 1600 euros tendrá la posibilidad de no perder su vivienda o bien, si todos sus miembros que están en paro y el valor de su morada no supera los 200.000 euros podrán ajustarse a la decisión del Gobierno por dos años". La felicidad desde ese rincón fortaleció los lazos con mi guarida.

28 comentarios:

  1. Un desastre, Esi, estos gobernantes nos incapaces de luchar por la gente, prefieren hacerlo por los bancos.
    Besos, cuídate.

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  2. Estàn en manos del poder financiero y solo hacen lo que ellos les dictan. Todo es una falacia.

    un abrazo

    fus

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  3. La miel siempre he pensado que es como el aborto de las abejas. Pero no me hagas mucho caso.

    Ojalá que la gente retenga sus techos. Que se calme todo, cuando la plegaria se une a la casualidad nace el milagro.

    Un beso por seis.

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  4. comparto la tristeza del momento y hasta la impotencia ante los hechos

    un abrazo

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  5. Trabajan para sus amos que tienen el dinero y el poder, nosotros les importamos un rábano...
    Besos y salud

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  6. He visto la miel iluminada por los reflejos del sol, y me ha inundado una pequeñita sensación de felicidad. Hoy, me quedo con eso.
    Besos

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  7. Ni la miel es capaz de endulzar los hechos.

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  8. Ovillarse en ese mar de aromas, protegerse, hacer un muro, leche, miel, olvidar ese tormento de números que nos agobia. Un abrazo.

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  9. Esi, cuidado con el resfriado; de todas formas, si éste, se pudiera cuantificar a buen seguro que nos embargarían la miel. Shhhh! Esi, no seas chivata, a nosotros los sin techo y en invierno, es lo que nos hará con suerte, llegar a la primavera.

    Abrazo sostenido.

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  10. Nada endulza ya los hechos, es todo un circo romano donde los más frágiles se debaten ante las fieras que no quieren dejar marchar a sus presas...pero eso si, animan a las mafias rusas y chinas a que compren casas aqui...

    Besos

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  11. Muy agudo eso de meter en un mismo texto dos pócimas. La primera milagrosa, y más con ese paisaje. La segunda parece milagrera aunque está mucho más cerca del trilerismo cutre de salón. Eso de que "tendra la posibilidad de" permite afirmar igualmente que tendrá la posibilidad de que no. Cada día uso más la palabra "insidias". Ni por lo más remoto llegamos a pensar que cuando se pronunció era una premonición de lo ¿insidioso? que es hoy casi todo el panorama. Y digo casi ya que hay señuelos que invitan y te llevan a la primera pócima. Gracias y un abrazo

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  12. no te preocupes que todo acabará el 21 de diciembre, desde ese día ya no necesitaremos casas donde habitar, ni miel de abeja para aliviar el resfriado :) como dice mi madre, hay que mirar siempre el medio vaso vacío de la vida, al menos ya no habrán niños hambrientos en las calles, ni gobernantes malos, ni votantes ignorantes... creo que el fin del mundo se ha convertido en una estupenda esperanza :(

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  13. La dulzura que se ve plasmada al principio, tras esa miel y que espera aliviar cualquier resfriado, se empaña tras la mirada de la cara de la niñez que ya le han embargado la vida sin tener todavía conciencia de donde esta.
    No perdamos lo que nos queda, dignidad y esperanza.

    Un abrazo querida.

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  14. bravo! bravo! bravo!

    abrazos, maestra*

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  15. Todo mentira, fachada, elecciones inutiles para nosotros, estamos en manos de personajes que no tienen ni vergüenza ni orgullo ni dignidad.

    Yo me iría a una cueva pero prefiero café, puede ser?

    Abrazotes

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  16. No esperaba que después de tanta dulzura, aterrizaras con esa noticia tan escabrosa regada con la incertidumbre de la credibilidad de las palabras que le dan vida.

    Me gusta cómo has estructurado el texto, pero me quedo con la primera parte, que me parece mucho más legítima y real.

    Besos Esilleviana.
    (Me llevé un premio con un hada que llevaba tu nombre; ya te contaré...). Más besos.

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  17. Ante el recuadro del comentario a publicar, diviso el de Laura y no tengo más remedio que leer -sabes que no me gusta leer otros comentarios antes de hacer el mío- y no puedo estar más de acuerdo con ella.
    Yo decía para mí... ¡hay que bien, me gusta! Pero al final me agriaste la leche a pesar de la miel.
    Lo de los desahucios es grave, pero tiene demasiada miga y hay mucho que esmorgar.
    Salu2.

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  18. Entre el resfriado y el tema descarnado de los desahucios, no se como le sentaría la leche al protagonista de tu relato. (No muy bien...)

    La imagen que pones me trajo a la cabeza la casita de Bilbo Bolsón (lo que es la imaginación, fíjate)

    Bss, guapa!

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  19. El techo, ese artefacto que a veces se nos cae encima, se ha convertido en la moneda de cambio del sistema. Lo que evidencia que el sistema está podrido, que la constitución es un cuento moldeable al antojo de la imaginación de quien la lea y que las bienaventuranzas fueron previstas por quienes tenían en la mente la desventura de los eternos miserables, esos para quienes está reservado el paraíso después de la vida.

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  20. No me gusta la leche uácala! Aun así le digo que su descripción de la leche con miel es tentadora, casi que me dan ganas de probar, pero no.
    Yo creo que mas valdría tomarse un whisky doble o un par de ginebras para acomodarse a la realidad que nos rodea ..., se que lo están pasando mal, nosotros no estamos mucho mejor (mal de muchos consuelo de tontos diría mi madre). Que le parece si nos emborrachamos juntas? Yo quiero un Campari o pisco sour, a ud que le pido???

    =D

    besos hic!

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  21. Seguro que repito algún comentario anterior, pero que lastima de principio dulce, hogareño, con olor a pantuflas, bufanda, carraspeo y mesa camilla, tachado por el chafarrinón de esa tomadura de pelo de un gobierno que no podrá curarse jamás de las toses de los banqueros.
    Un abrazo.

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  22. Muchos creyeron que el maná caía del cielo y se lanzaron a comprar en lugar de habitar viviendas de alquileres bajos... Se creyeron potentados y les dieron en los morros ¿Que todos tienen derecho a una vivienda digna? Claro que sí, pero con los especuladores, constructoras y bancos no se juega porque se las saben todas y echan la red cuando menos te lo esperas. La palabra prudencia la desconocen muchos que han llegado creyendo que venían a Disneylandia.

    Sólo es una opinión y a quien le pique que se rasque...
    De los de aquí no digo nada, pero quienes han llegado, han hundido medio país y dejan las llaves de su casa y su coche en el banco y regresan a sus países habiendo cagad... en este; en fin...

    Un abrazo y un cafelito.

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  23. A mí también me ha gustado mucho tu texto, pero como han dicho más arriba, me quedo con la primera parte, es mucho más acogedora. Me ha gustado mucho tu entrada. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
    http://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/

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  24. Nunca entendí a la gente que prefiere vivir endeudada asta el cuello con tal de tener los objetos de la última moda o la ropa de marca necesaria con que insisten en las publicidades, o un auto nuevo cada año...

    La verdad, inentendible...

    Saludos

    J.

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  25. Todo está pensado para gente con gran poder adquisitivo. Sin duda los mafiosos, lo tienen, y habrán recibido la noticia encantados; prosperarán en nuestro país. De hecho me consta que ya lo hacen hace tiempo.


    Un saludo.

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  26. ¡Qué suerte la nuestra que nos alegramos con tan poco!

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  27. ¿Te costipaste? achis!!!! pues leche y miel calentitas y a cuidarse, de lo que escribes más abajo, no se si sirve para aliviar o para acongojar, no se, no se...
    Un abrazo.

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