Leo a Cortázar para pensar en ti. No tengo claro cuanto deseo besarte para fantasear con tus labios y tus manos o bien imaginarte para ambicionar lo que pretendo, perfumar tu ropa con esta atracción. Mientras tanto precinto y sobrellavo por mandato judicial la gama de fotografías que conservo de ti en todos los lugares que compartimos. Hasta que llegan las puntualizaciones de tus besos: esos toques de tus labios en mi oreja eran la pincelada ligera que hacían originar un filón de sensaciones en la nuca hasta descender por la columna vertebral. Al rozar tus dedos en mis piernas, el frescor captado se identificaba con la humedad que se introduce por las ventanas al abrirlas de par en par en una noche de octubre. Las delicadas palmadas humeantes entregadas a mi carne para sentar producían la delicia inmortal como la parte más espiritual de mi cuerpo. Este día de Rayuela aspiro el recuerdo de tu efigie para disfrutar de tus besos, junto al terso recorrido de mis dedos por tu espalda con el que terminar la ruta en el bolsillo de tus pantalones del chándal.
"Para terminar la ruta en el bolsillo del chándal donde busco un paquete...con dinero" :))
Mª J. de P.
Usemos buenos libros para agasajar esos besos que vienen como el premio insoluto de una lengua binomial.
ResponderEliminarUn beso es la segunda cosa más maravillosa del mundo.
Entonces, un beso.
si alguien dijo alguna vez que no entendía la vida sin música, creo que debo de añadir que la vida sin besos
ResponderEliminarsería un verdadero desperdicio.
Nada como un beso de cine... nada ainsss (suspiro)
ResponderEliminarBesos abisales
Tendré que volver a leer a Cortázar...
ResponderEliminar:)
Besos, Esi.
Cuanta sensualidad!!! no hay nada tan hermoso como la complicidad de`dos almas acariciándose
ResponderEliminarBesos
Y digo yo, al bajar las sensaciones esas tan ricas por la columna vertebral¿No llega un momento que se desvían de la columna dando igual que sea a la derecha o a la izquierda?...jajaja
ResponderEliminarBesos y salud
De cine sí. Menos mal que has parado. ¡ya seguimos los demás¡
ResponderEliminarVoy a romper el maravilloso encanto. Perdóname.
ResponderEliminar"Para terminar la ruta en el bolsillo del chandal donde busco un paquete...con dinero"
No es mala opción leer a Cortázar, pero puestos a besar, yo pensaría sólo en ese que con sus besos me provoca y dejaría la lectura para luego:):)
ResponderEliminarBesos
¡Besos! y una leche.
ResponderEliminarUn abrazo y sonrisa
Se empieza por los besos y se termina... ¿en el bolsillo del pantalón del chándal?. real cómo la vida misma.
ResponderEliminarBesos
Creo que debo tener hielo por aquí, sí, ¿dónde coño estaba? ¿es agosto? ¿miente el calendario?
ResponderEliminarLady Esi, me las paga todas juntas!!!, jajajaja
Un beso
...es que un buen fajo de billetes puede originar un buen filón de sensaciones... :)))
ResponderEliminarBesito y café.
No hay nada más artificioso que un beso de cine, rotundamente mejor son los besos en el cine.
ResponderEliminarUn beso (de amigo)
Hay que besarse más. Nunca es suficiente.
ResponderEliminarEs que un buen beso puede llevarte al infinito y más allá.
ResponderEliminarHa sido placentero como un beso encontrar tu blog por eso me quedo leyendo, besando y disfrutando de todo aquello que por aquí ofreces.
Saludos desde Tenerife y te dejo enlace de mi blog por si quieres conocerlo.
http://gofioconmiel.blogspot.com.es/
Habría que preguntarse que juez es ese que incauta fotos sobre la intimidad de cada cual.Pero ¿a dónde vamos a llegar?.
ResponderEliminarMuy sensual todo el texto. Y además esto es como algunas pelis o relatos, que tienen final alternativo. El de paradela tiene mucha retranca...Un abrazo
Buen libro para amenizar un beso de cine en el que narras las sensaciones del protagonista y las haces llegar al lector de una forma sensual y muy bella.
ResponderEliminarMe encanta el inicio : Leo a Cortázar para pensar en tí. Desde ese momento me has captado. El final es como... aterrizar en la una realidad demasiado vulgar para todo la belleza que entraña un beso. ;)
Besos de Cine, hoy para tí, por ejemplo el de cualquier actor que te guste mucho.
dejame decirte en primer lugar que tu texto es maravilloso, sensaciones que uno guarda en el cerebro, que nadie te las puede explicar ni enseñar con palabras, si no la has vivido simplemente serán palabras vacías sin un significado para nuestra mente, y eso lo que tenemos como secreto las personas que han caminado mucho por el sendero del amor y el deseo, algo que los jóvenes no se explican y que la experiencia nos marca como viejos, acumulando momentos que se guaredarán en nuestra memoria para siempre, y que al leerte esas neuronas harán que nuestra piel sienta que está sucediendo de nuevo, cada beso, cada roce, cada latido, cada suspiro, sumergiendonos en el delirio de retroceder el tiempo sin movernos de nuestro aciento....
ResponderEliminarlamentablemente ese final es tétrico, rompe todo sueño y te golpea con lo incierto, buscar en el bolsillo un paquete de dinero, sólo podría encajar cuando uno presta algún servicio de sexo, yo lo he buscado cuando era un adolescente, cuando me pagaban por un poco de caricias las amigas de mi madre que me miraban con deseo y que buscaban en habitaciones clandestinas sentirse jóvenes de nuevo, es por ello que yo no pago por sexo, y si fuera así, no tendría ganas de besar a una mujer que tiene coitos dentro de su garganta y que quizás me contagie de herpes, es complicado trabajar en esos menesteres, lo sé por experiencia.... excelente entrada, dan ganas de usarla en mi cámara oscura :)
En este caso prefiero quedarme con la mano introduciéndose en el bolsillo del chandal y escudriñando, igual hasta tiene un agujero, jajaja.
ResponderEliminarUn abrazo
En la causa inmaculada de una buena película, en la cubierta de algún libro polvoriento, dejé la fantasía y me concentré en los besos.
ResponderEliminarAhora, ellos son mi ficción, mi personaje.
Jo, Esi, con el toque sensual que el has dado y ahora sale un chandal por ahí para poner la nota discordante... se acaba de cargar la escena por completo....¡será posible! jajajaja
ResponderEliminarBss, maja!
Como en todos tus relatos, acabas jugando con el lector. Nos llevas, amarrados a tu prosa, a un sensual viaje donde el amor con mayúsculas es nuestro acompañante, para que, en una última y desgarradora frase, nos sueltes de la mano, para que sepamos de la triste realidad que nos rodea.
ResponderEliminarComo siempre, brillante.
Un abrazo.
El cine ha hecho mucho por el beso.
ResponderEliminarRecuerdo algunos fabulosos, sobre todo esas miradas previas...¡ay, Esi!
Un abrazo grande
Qué bueno es recordar, es casi como estar ahí de nuevo. Y así como que un beso no se le puede negar a nadie, también es cierto que mejor aún, es intentar, descubrir.
ResponderEliminarTu entrada se amalgamó con el capítulo 12, tan bello como todo lo que vos escribís.
ResponderEliminarUn abrazo.
:)
Sensual... y excitante...Pero no se puede vivir de recuerdos.. hay una nostalgia triste en el escrito.. un saludo.
ResponderEliminarJRJ:
ResponderEliminarMas cuando tú me coges,
me lo siento
todo,
duro, suave, dibujado, lleno,
y gozo de él en ti y en mí
contigo, descubierto, en su secreto.
Yo una vez también me enamoré de La Maga, pero hace tanto tiempo que ya no lo recuerdo.
ResponderEliminarNostálgico.
Abrazos
Vamos que después de sentirse uno en el septimo cielo, resulta que lo que hay en el bolsillo, con lo que se topa, lo que busca ¿es dinero? !Cruel realidad!
ResponderEliminarDe un manotazo, del cielo ,directa al suelo
Un abrazo Esi.
Muy buena la manera como empiezas el post: "Leo a Cortázar para pensar en ti".
ResponderEliminarSaludos
David
que oportuno...algo parecido senti yo esta mañana... y sin leer siquiera a Cortazar...
ResponderEliminarhermoso post...
Un abrazo...¡¡¡
Déjame que te cuente
www.dejamequetecuente.net
Este me ha gustado mucho.
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