De un empujón logró derribar la puerta del cuarto en el que trabajaba, antes de que el arqueo de la bombonera exhibiera el efectivo que aportó el último cliente. Alguna vez idealizó llegar a contraer matrimonio con aquel chico que creció junto a ella mientras observaba su sonrisa, sus ojos y escuchaba su voz. Al llegar de la pequeña ciudad en la que nació se instaló en una pensión humilde, apenas tenía trato con otras personas pero por mediación de una conocida acometió una nueva tarea: trabajar en una confitería. Allí entre descripciones, detalles e inventarios descubrió el lujo que excede lo necesario y algunos hombres inclinados a desembolsar parte de su cartera sin pensar mucho en la corriente y el torbellino de aquellas circunstancias. Sin llegar a romper sus sueños, instalada en el anverso de sus monedas, jugaba con la grasienta y obscena mentira de ver actores y números, ausente del individuo que tenía a su espalda. Aprendió a no hacer sacrificios, ahogando renuncias a los consejos de algunos de sus propios clientes. Así entre la complicidad y el silencio de sus vecinos, fingiendo con disimulo que no la veían entrar y salir acompañada, agregada a la comitiva sin parientes cercanos y plañideras que lamentar. Poco a poco conformó los distintos episodios a modo de una almazuela, cosiendo cada jornada rectangular con la que crear la manta que la abrigaba, confeccionada a partir de recortes, momentos y trozos del atuendo de los consumidores. Y entre los rijosos con miradas lascivas, los indolentes que no se levantan ni para comer, aquel otro fundado en la experiencia, el indiferente movido por la inercia, el alevín difícil de pescar, el movedizo que se escurre entre las arenas sueltas y mezcladas, caía a tientas ante el celador. ¿Cómo presentir otro mundo posible, sabiendo que la representación debe proseguir sin un prospecto guardado, ignorando una salida distinguida?
"¿Quién no escribe una carta? ¿Quién no habla de un asunto muy importante, muriendo de costumbre y llorando de oído?"
"¿Quién no habla de un asunto muy importante, muriendo de costumbre y llorando de oído?"
miércoles, 19 de octubre de 2011
Cocotte
De un empujón logró derribar la puerta del cuarto en el que trabajaba, antes de que el arqueo de la bombonera exhibiera el efectivo que aportó el último cliente. Alguna vez idealizó llegar a contraer matrimonio con aquel chico que creció junto a ella mientras observaba su sonrisa, sus ojos y escuchaba su voz. Al llegar de la pequeña ciudad en la que nació se instaló en una pensión humilde, apenas tenía trato con otras personas pero por mediación de una conocida acometió una nueva tarea: trabajar en una confitería. Allí entre descripciones, detalles e inventarios descubrió el lujo que excede lo necesario y algunos hombres inclinados a desembolsar parte de su cartera sin pensar mucho en la corriente y el torbellino de aquellas circunstancias. Sin llegar a romper sus sueños, instalada en el anverso de sus monedas, jugaba con la grasienta y obscena mentira de ver actores y números, ausente del individuo que tenía a su espalda. Aprendió a no hacer sacrificios, ahogando renuncias a los consejos de algunos de sus propios clientes. Así entre la complicidad y el silencio de sus vecinos, fingiendo con disimulo que no la veían entrar y salir acompañada, agregada a la comitiva sin parientes cercanos y plañideras que lamentar. Poco a poco conformó los distintos episodios a modo de una almazuela, cosiendo cada jornada rectangular con la que crear la manta que la abrigaba, confeccionada a partir de recortes, momentos y trozos del atuendo de los consumidores. Y entre los rijosos con miradas lascivas, los indolentes que no se levantan ni para comer, aquel otro fundado en la experiencia, el indiferente movido por la inercia, el alevín difícil de pescar, el movedizo que se escurre entre las arenas sueltas y mezcladas, caía a tientas ante el celador. ¿Cómo presentir otro mundo posible, sabiendo que la representación debe proseguir sin un prospecto guardado, ignorando una salida distinguida?
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Es que hay laberintos sin salida.
ResponderEliminarY a veces, te cansas de buscar.
Buen texto.
Un abrazo.
Aún a riesgo de no haberte entendido lo suficiente, te dejo mi comentario:
ResponderEliminarEl dinero fácil es capaz de sanar hasta las náuseas, y agriar hasta lo más dulce.
Sabes que tus textos no me resultan fáciles, pero yo sigo en mi empeño, y creo poco a poco te voy cogiendo el punto.
Buenas noches.
No recuerdo haberte contado nada de mis aventuras, nada te dije de que me propusieron matrimonio. Ni recuerdo haberte dicho que no tengo un puto duro en la cartera. Ni que me anuncié en la red como acompañante.
ResponderEliminarHoy, descubierto, te confieso que me gustaba, maldito olor a cebolla y ajo, no lo soportaba.
¡Ay! ¡Siempre agitándome recuerdos!
Un beso lejano, que tó se pega.
¡Ah! Sé que traeras tres sopaipas.
¿Por qué me amáis los que me odiáis y me odiáis los que me amáis?
ResponderEliminarLos que me negáis, confesadme;
y los que me confesáis, negadme.
Los que decís la verdad sobre mí,
mentid sobre mí;
y los que habéis mentido sobre mí,
decid la verdad sobre mí.
Los que me conocéis, ignoradme;
y los que no me habéis conocido,
conocedme.
Pues yo soy el conocimiento y la ignorancia,
la vergüenza y la osadía;
soy una desvergonzada y estoy avergonzada,
soy poderosa y estoy atemorizada,
soy la guerra y la paz..
Prestadme atención:
yo soy la que ha caído en desgracia
y la más grande.
Prestad atención a mi pobreza
y a mi riqueza.
Yo, yo estoy libre de pecado y la raíz del pecado procede de mí.
pues en esos momentos ni se lo plantean
ResponderEliminarMenos mal que existen los sueños para ser soñados, aunque esté la realidad como un muro para desintegrarlos. Pero de todas formas, ella tiene un no sé qué, que me seduce. Un abrazo.
ResponderEliminarSin ese recuerdo del joven que creció junto a ella sería una más del montón. Con ese sueño imposible se redime al final, le resulta un motor que la empuja. Y los sueños, al final son nada más que eso...
ResponderEliminarCada uno intenta elegir el camino mas fácil, no siempre el correcto para los demás pero posiblemente el que mas se ajusta a lo que somos o lo que podemos ser. Dos besos.
ResponderEliminarSuena a otros tiempos de doble moral, a historia antigua que ya viene sugerida por el título. A una elección difícil para ganarse la vida por las circunstancias que le han llevado. Siendo y sintiéndose la victima de sus propias desilusiones y decepciones. Prisionera y resentida, soportando el sacrificio y la insatisfacción que debe de darle a una mujer la mala vida elegida cada vez que abre los ojos, cuando se pregunta y se ve atrapada en la vida de una ramera.
ResponderEliminarAbrazos
Un texto, un poco complicadillo para mí. Te comento
ResponderEliminaren otra ocasión. Vale? Me ha ha sonado muy bién pero me pierdo entre tantos entresijos.
Te dejo un fuerte abrazo.
Sigue la representación sin un plan B...Efectivamente, así es imposible imaginar otro mundo, nos tenemos que conformar con los recuerdos y con los sueños de los que pudo ser....
ResponderEliminarOh, trabajar en una pastelería, sería mi ruina física y médica.
ResponderEliminarHay otros mundos, otras realidades, dependiendo del camino que hubiéramos tomado, estoy seguro de ello.
Un beso
Traducción:
ResponderEliminarCocotte era astuta y cobarde.
Venga, otro texto, que estoy que me salgo.
Dadá-bicos.
Todas las confiteras acaban siendo gordas. Los confiteros también . Demasiada buena vida.
ResponderEliminarHay un momento en la vida en el que se presenta la posibilidad de elegir uno u otro camino, siempre hay uno que parece más fácil... algunos/as lo elijen.
ResponderEliminarUn beso.
HD
tu relato me deja pensando si somos todos actores que representamos un papel.
ResponderEliminarcosiendo cada jornada rectangular con la que crear la manta que la abrigaba, confeccionada a partir de recortes,.. maravillosa frase.
mil besos*
(y tuve un buen viaje!)
No me refiero al tema que efectivamente, es bastante frecuente, Valérie Tasso, que nadie la conoce en Francia, se ha recreado de lo lindo con este viejo asunto en nuestro país. Me refería al lenguaje que utilizas, que junto a las metáforas, a la moral, descripciones y al escenario en el cual se recrea, lo sitúa en otro tiempo, no en la actualidad, en la posguerra civil, por ejemplo, tal vez antes, en la soledad de los tiempos difíciles. Eso es lo que me parece.
ResponderEliminar+ Abrazos
En algún momento podemos elegir sendero, el mejor, no es el más fácil. Muy bueno. Un abrazo.
ResponderEliminarNo hay nada más feo que estar atrapado en una realidad, por más inventos que uno se haga.
ResponderEliminarUn saludo.
Si tú ya sabes, y muy bien, mejor que yo. Lo que observo es que te gusta recrearte en "la escritura oculta" porque no dices las cosas sencillamente tal cual son. Utilizas demasiadas figuras, recargas el lenguaje y el lector se tiene que esforzar para descifrar, interpretar, y en ocasiones, confundir la historia que estás contando, pues parecen en si mismas una nueva historia. Es decir, cuando utilizas demasiadas figuras retóricas, redundas en lo que quieres decir y dependiendo de las comparaciones, se crea una dispersión momentánea de lo que estás contando, y una tras otra hacen demasiado impacto en lo que se cuenta.
ResponderEliminarHaz un ejercicio, escribe la misma historia con un lenguaje sencillo, suprime adjetivos, suprime complejas construcciones gramaticales descriptivas con comparaciones y figuras, di simplemente lo que quieres decir. Como si me lo tuvieras que contar en el lenguaje hablado, suprime toda la "decoración" y utiliza términos modernos, actuales.
+ Abrazos
A mi me ha recordado a los pecados capitales, la gula y la lujuria, el placer por los pasteles y el placer por eso mísmo. Y si ambos son cosumidos con deleite, nos queda tu final lleno de incertidumbre.
ResponderEliminarUn abrazo.
difícil elección y a veces ha supuesto para algunas personas, la única. Debe ser muy duro soportar el sacrificio que uno mismo se impone.
ResponderEliminarUn abrazo
Estoy de acuerdo con José Alfonso, es toda un riqueza cultural y personal poder leerte. Piensa que soy de Badajoz, por tanto, todo...
ResponderEliminar(N'er blòh de la Birlli, la kanaria)
_________________________
Èrèh una pelotiyera de kuidao.
Me gustan tus textos, pero eso sí, siempre que te leo, tengo el diccionario al lado :))))
ResponderEliminarUn beso
¿Ves como no puede ser?
ResponderEliminarEs un 2 x 1
Ofú...
Cagonmipadreeeeeeeeeee...
ResponderEliminarAusente del individuo que está a su espalda. Solo concentrada en sus números. Un beso!
ResponderEliminarLos mejores cuentos cortos,en mi opinión los escribe Liliana. Tiene oficio y control, tiene la mejor técnica literaria y la más pura que he visto en los blogs, escribe sin tonterías y con una sencilla mecánica de mucho valor didáctico. Su blog es http://lanavedelg.blogspot.com/
ResponderEliminarLo de la creatividad que me dijiste me pareció estupendo.
Para experimentar, primero hay que saber crear, que todo tenga un orden y un sentido, dominar la técnica.
Cada uno escribe como puede.......a veces es como quiere a veces no. Lo bueno es que se salga a la luz. Para juzgar hay filas.
ResponderEliminarPlatón entendería muy bien ésta historia. Y, quizá, hasta diría que le ha gustado tanto como a mí.
ResponderEliminarSaludos
J.
No, si yo el texto lo entiendo perfectamente pero alguien no entiende lo que yo digo. No digo que nadie deba de hacer aquí un análisis de texto... es más, que cada uno escriba y lea como mejor pueda o quiera, como le de la gana. Por ejemplo, me he metido en el Blog de José Alfonso y me ha parecido una Genialidad. Otra cosa, yo no juzgo, hago comentarios con el permiso de la AUTORA de este Blog y además con su consejo de que me implique libremente, es la única manera que tenemos los dos de intentar ser creativos y aprender algo. Y si estoy aquí y digo lo que digo es porque me crea muchísimo interés lo que escribe y como lo escribe.
ResponderEliminarEsilleviana, tú puedes poner "algo de ilusión, de fantasía y de utopía; de ahí que utilice comparaciones, retuerza y contorsione las palabras para intentar lograr hallar otra existencia o realidad diferente a la que yo vivo. Me gustan que aquello que leo me transporte y me lleve a otra verdad o situación."
Si esto que dices no lo justificas bien en el texto, pasa de ser una escritura compleja a una pesada y desordenada.
Por ejemplo: El lenguaje que has utilizado:
_Nos retrotrae en el tiempo por las siguientes expresiones, palabras, acepciones...:
El título. "Alguna vez idealizó llegar a contraer matrimonio", " Al llegar de la pequeña ciudad en la que nació se instaló en una pensión humilde", "acometió una nueva tarea", "comitiva sin parientes cercanos y plañideras", " a modo de una almazuela"," una salida distinguida".
_El tono de la historia y las construcciones gramaticales también nos retrotraen pues ambas cosas son antiguas.
_ "Sin llegar a romper sus sueños" = sin dejar de soñar. "instalada en el anverso de sus monedas" = acomodada, consciente de que el dinero la venía bien." jugaba con la grasienta y obscena mentira de ver actores y números" = se lo tomaba como un trabajo y evitaba a su conciencia. "ausente del individuo que tenía a su espalda" = sin importarle con quien se iba a follar.
Prácticamente hay que trasladar todo el texto en para leer porque es una autentica metáfora de lo que realmente está pasando y con la abundancia de adjetivos ni me meto.
Esto es algo de lo que quiero decir, nada más, espero que no te moleste a ti ni a nadie. Y si molesta pues me lo dices o decís, dejo de dar mi opinión, y todos tan amigos.
+ ABRAZOS
_
Esto trata de caminos y decisiones a tomar. ¿Quien decreta cuales son las correctas? besos.
ResponderEliminarPor mi parte estoy encantado de leer a personas que escriben con una riqueza de palabra como la que tu posees, eso nos ayuda a aprender algo de nuestro lenguaje que se ha ido perdiendo a base de frases facilonas, no te digo los sms.
ResponderEliminarUn abrazo.
Uno nunca sabe bien hacia dónde nos llevará la vida.
ResponderEliminar¿Será entonces que Forrest Gump tenía razón y "la vida es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te va a tocar"?
Abrazo.
Hace tiempo que dejé de perseguir una senda. Y quienes la persiguen, me asustan. Herméticamente me encerré en un callejón sin salida.
ResponderEliminarDesde entonces no hay ningún tipo de sacrificio capaz de hacerme mover un dedo.
Y camino como una autómata sin intentar encontrarle ningún sentido a las cosas.
El destino de una vida? Aleatorio...
Besos.
uhmm guardar las apariencias en estos tiempos.. no tengo tiempo ya ni de escribir mi vida es muy intensa.. pero me has hecho reir con tu interpretación del cuento.. lo que es conocer a la autora en sus veiledades ..jajja.. Me gustan tus textos porque si se los pongo a los alumnos deben buscar la mitad de las palabras en el diccionario.. un beso
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