"¿Quién no escribe una carta? ¿Quién no habla de un asunto muy importante, muriendo de costumbre y llorando de oído?"
"¿Quién no habla de un asunto muy importante, muriendo de costumbre y llorando de oído?"
sábado, 16 de julio de 2011
Rechazar el sopor
Determinó el valor del espacio que quedaba entre la punta de su pie y el talón del otro al subir los peldaños, la huella de la escalera no estaba muy fina, a la vez que arrastraba su maleta por el tirador después que dos de sus ruedas acabaran partidas. Franqueaba los pasos mientras abría caminos acumulando bríos de los gaudeamus que asistía, para carcajear con extraños cerrando los párpados. Atrás quedaba vanagloriarse de ser una mujer única, pasar horas embelleciendose para alardear de todo lo que la naturaleza le había concedido entretanto exploraba distintos terrenos a fin de encontrar aguas cristalinas. Consumidos sus ratos de solaz se dedicaba a clasificar las tuercas para ajustar tornillos que atesoraba en su maleta, como si fuera un osario con una inscripción grabada. Algunas de las tuercas tenían el roscado desgastado de tanto forzarlas, entonces se entrenía pasando una terraja para realzar las marcas en los momentos de flaqueza. Hasta que escuchaba el tantán de a bordo, cuando se iluminaban los acantalidos con el runrún de los coches al tiempo que espigaba en el instante que le regalaban casualidades como a los novios que se van a casar. Invertía las hélices hacía la gaceta de su aldea siendo así la duplicación de aquella realidad perfecta en la que paraba.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Bueno... Al menos, algo es algo. Mientras se fuerce el viraje, le señal es clara de que existen intenciones. Y cada cual, su modo. Ida y vuelta se pueden reproducir tantas veces como se desee.
ResponderEliminarUn abrazo.
El tiempo pasa para todos y nos obliga hacer de vez en cuando algún que otro cambio. Besos.
ResponderEliminarGadeamus igitur, siempre es una buena opción rechazar o despreciar lo que es accesorio.
ResponderEliminarUn abrazo, srta. Esi.
No pases mucho calor.:)
No sirve realzar las marcas, porque el tornillo se adelgaza y convierte en inservible.
ResponderEliminarmirá
ResponderEliminar"...se dedicaba a clasificar las tuercas para ajustar tornillos que atesoraba en su maleta, como si fuera un osario con una inscripción grabada. Algunas de las tuercas tenían el roscado desgastado de tanto forzarlas, entonces se entrenía pasando una terraja para realzar las marcas en los momentos de flaqueza..."
este fragmento no está fuera del texto, sin embargo, tmb habla por sí solo, como un resumen de lo verdadero.
lo que hacemos, no? para no darnos cuenta que lo forzado no tiene caso!
un abrazo preciosa!!! buen día
Cada instante, cada hora, cada dia que pasa es un nuev paso de rosca que se va desgastando. El tiempo y la belleza se van pasando. Hay que adaptarse a ello, aunque sea haciendo muescas a las tuercas.
ResponderEliminarUn abrazo
Es que eso de ser mujer única acaba pagándose, verdad?
ResponderEliminarLa perfecta realidad es dura de entornillar.
Besos.
Mujer única que llueve aguas cristalinas de la mano.
ResponderEliminarentre tantanes y runrunes avanza el espejismo, y la vida se desgasta.
ResponderEliminarmil besos*
El roscado estaba desgastado de tanto forzarlo, intentando siempre luchar contra el destino agotando un poquito más de nuestras vidas en el intento de cambiar los giros del destino.
ResponderEliminarQuizás es mejor sentarse en esta playa tan hermosa y descansar, descansar.
Muchos besos y buen domingo amiga.
A mi me parece una mujer que va ajustando sus pasos, ampliando su lugar, mientras tanto hace algunos malabares, pero sabe.
ResponderEliminarUn abrazo Amiga!
todo material se fatiga y nosotros no estamos excento de ello
ResponderEliminarlo mejor es acoplarse y reinventarse , reciclarse y restituirse cada cierto tiempo , en las distintas instancias que la vida nos va vistiendo
besitos y mil gracias por volver siempre
gracias por tu comentario, te doy toda la razón, lo que ocurre es que el post era algo de política íntima de problemas más o menos personales, lo que ocurre es que he empezado en sentido amplio, muchos besos
ResponderEliminarUn texto en el que se destacan los sonidos, te diría, mi querida amiga, que hoy escuché tu bello relato.
ResponderEliminarUn beso.
Humberto.
es cuestión de tuercas que no deben forzarse...si una tuerca tiene su tornillo,
ResponderEliminarle esperará eternamente y cuando estén en contacto, todo encajará en un recorrido helicoidal, húmedo, festivo...evanescente, efímero, episódico y esporádico...como lo es la felicidad. A veces...
No importa la actividad que realicemos mientras esperamos, pareciera que el tiempo se arrastra y la mente divaga perezosamente.
ResponderEliminarHasta que el runrun se hace cada vez más cercano...
Pues qué te diré, menuda carga de piano de cola carga ella. Tiene la carga de saber que en su pasado, en algún momento fue considerada una mujer única o ella se vislumró como tal. Joder.
ResponderEliminar¡Qué chévere!
Un abrazo. Saludos.
F.
El mecánico más cruel que conozco es mi cardióloga, siempre me busca la avería y me aprieta las tuercas cruelmente.
ResponderEliminarUn beso
Ay, qué poztura zezuá más difícil, jamía.
ResponderEliminarDice Camps que no pilla el texto. Y que si va por él lo de las tuercas. Llámalo y eso.
Dispersión de imagenes hacen confluir en una idea,,escritura cubista pudiera clasificarse...unsaludo
ResponderEliminarComo dicen que decía en alguna parte de Delfos, lo importante es conocerse a uno mismo.
ResponderEliminarSaludos
J.