La mentira merodea habitualmente por todas las biografías. Hay ocasiones que vaga curioseando y observando nuestras pertenencias con un impermeable por si arrecia la lluvia o arrebata el hormigueo del chaparrón. En otros momentos se esconde en bolsos, macutos o maletas que ante la sorpresa del agente de servicios de aduanas que vigila las fronteras de las emociones y tras sujetar con fuerza la valija, comprueba con extrañeza el sigilo con el que se confina a un expatriado destapando con flema la gabela de la metáfora del apego. El engaño va debilitando uno a uno todos los trastos que forman la realidad hasta que comienza a rodar cuesta abajo desviándose de la línea divisoria veraz, buscando ahuyentar la existencia concreta envuelta en una pista de hielo sobre la que patinar corriendo el riesgo de que la capa del lago pueda romperse en cualquier instante. Entre secreciones de tus viejas palabras e imágenes desfiguradas me contagio de recuerdos infestados que conservo en maletas gastadas, remendando conjeturas trapaceras hasta "vivir una edad en el sentido contrario al de la espera".
Todo el mundo miente...
ResponderEliminarTal vez, desenmarañar nuestra propia verdad resuelva el enjambre incluso de nuestra propia biografía.
Besos, Esi.
Nos mentimos hasta a nosotros mismos en nuestra propia historia... supongo que porque siempre tenemos cosas que ahuyentar.
ResponderEliminarBss
Me gusta la idea de la foto, construir para la medida de las cosas que tenemos y no lo contrario...
ResponderEliminarBesos y salud
No sé si hablas de la mentira, si estás bajo el agua o, por el contrario, te subiste más allá del sol...
ResponderEliminarBesos.
es que la mentira es mala aliada de la verdad, la destruye..... Saludos Esilleviana!!
ResponderEliminarA partir de cierta edad, las lumbares ya no pueden con tanto peso y llega un momento en que las maletas llenas de " recuerdos infestados y secreciones varias" pesan más que el plomo y hay que quedarse con sólo una mochila de cabina para viajar más a gusto. Aunque cueste.
ResponderEliminarBesos :)
Y que me dices de esas advertencias preliminares de "hablando con totalñ sinceridad" antes de soltar la parrafada... predisponen bastante. No se quien dijo que a las mentiras y a los engaños había que tenerles mucho respeto, ya que tomaban cuerpo. Un abrazo.
ResponderEliminarParece que la sinceridad hubiera pasado de moda...en las biografías es casi "previsible" pero en lo cotidiano una tristeza.
ResponderEliminarSiempre es un gusto pasar por tu casa.
Besos Esi.
Todo se va mezclando, a veces para bien y salud de nuestra memoria, persiste solo lo que nuestro propio aduanero deja pasar.
ResponderEliminarTus letras y las composiciones de Rieke, me han encantado. Una forma muy creativa de ir resumiendo los recuerdos...
un fuerte abrazo
Esto me ha recordado, aunque quizá tenga poco que ver, a la mirada profunda e indefinida que Tolkien imaginó en los elfos. Según una descripción de la misma dada en el Silmarillion, los elfos simultaneaban el don de la inmortalidad con el lastre de la memoria indefinida. Parece ser que eran incapaces de dejar de recordad nada y así su mirada era una amalgama de tristezas, alegrías y llanuras más bien grises, y eso amplificado por el hecho de poder vivir, por ejemplo, diez mil centurias. O más.
ResponderEliminarY sobre eso de la mentira y ya metidos de lleno en el terreno que nos es propio, o sea, la mortalidad física, pues hay grados. No es lo mismo mentir para salvar a tus seres queridos o a ti mismo que falsear los hechos por deporte. En el primer caso yo diría que la mentira está más que justificada, en el segundo, sin embargo, constituye un juego más que peligroso puesto que confunde la vida real del individuo (ante sus propios ojos) al extremo de poder hacerle caer en una suerte de virtualidad que, antes o después, acabará con su autoestima y, finalmente, con su cordura. No, a no ser que sea estrictamente necesario, hay que ser veraz.
Como corolario apuntar al dominio de la red, dominio en el cual se mueve la blogosfera, la forosfera y cristo que los fundó. Yo siempre he mantenido que un nick no es una patente de corso para estafar la buena voluntad de las gentes con las que interactuamos, de ninguna manera. La necesaria opacidad sobre datos de nuestra biografía personal que pertenecen a nuestra intimidad es sólo eso, ausencia de información. Pero dar información que distorsione "al alza" al emisor de la misma, no sólo es penoso, también y como decía, peligroso (para él mismo). Efectivamente, también aquí hay que ser honesto y persona de fiar.
Y sólo me resta decir que aligual no he entendido lo que has escrito y me he ido por los cerros de Úbeda, jajajajajaja
Feliz agosto para ti y los tuyos
Un beso
¿Qué narices es eso de "el agente de servicios de aduanas que vigila las fronteras de las emociones"? ¿Qué clase de mierda os pasan en Extremadura? Yo sólo manejo marihuana de la de toda la vida. Pasa un poco, anda.
ResponderEliminarLa mentira forma parte de nuestras vidas, hasta no poder distinguirla, mezclada con medias verdades, fantasías y realidades adaptadas, al final no sabemos que es cierto y que no, ni que cantidad de mentira podemos aceptar sin que produzca daños irreparables.
ResponderEliminarQue negra estoy hoy jolines, será el calor jeje.
Besos
cuando todo se recubre de verdad
ResponderEliminary parece el sueño de las mentiras
es el momento de poner las cosas en su sitio y apañárselas con los aduaneros, tela marinera, los muy ladinos
A mentir se ha dicho...!
fuerte abrazo
¡Cuanta mentira nos rodea! pero, ¿acaso seríamos capaces de soportar toda la verdad de cuanto vivimos?. Saludos.
ResponderEliminarAl final uno ya no distingue entre verdad y mentira, entre realidad y sueño.
ResponderEliminarBesos
Como dice mi suegra: la mentira tiene las patas muy cortas, lástima que no se aplique el dicho, jaja
ResponderEliminarun beso
Venia yo muy dispuesta a dejar un comentario sesudo, pero hace un calor de muerte y como me he entretenido en leer a todos los comentaristas amigos, pues un poco de todo Esi, un poco de todo.
ResponderEliminarUn abrazo grandote.
Tengo un problema con la verdad. Como si todo ya fuese mentira... Un abrazo.
ResponderEliminarLa mentira es tan necesaria como la verdad... el problema es cuando se usa para hacer daño.
ResponderEliminarNo porque todo el mundo crea en una mentira, se convierte en verdad. La mentira es un fantasma que nunca te dejará en paz, mientras sólo tú sepas la verdad... y esto no significa que haya que decir la verdad, sino hacer las cosas con honestidad.
ResponderEliminarabrazo
primero felicitarte por la imagen, es impresionante, las maletas convertidas en libros en el estante, son miles de cosas, miles de palabras, emociones, guarda una imagen tan intensa como esta, realmente me has impresionado, no logro quitármelo de la mente, es tan exquisita como irreal, tan creativa como imaginativa, tan ambigua como lo son los sueños cuando los intentamos plasmar en la realidad, me ha encantado, gracias por compartirla
ResponderEliminary tus letras, hoy, te siento libre y sin ataduras, navegando con tus frases tan simples y llenas de sentimientos encontrados, tratando de explicar lo inexpliable, tratando de encagar plabras bonitas para algo que muchos lo tildan de defecto, el peor defecto de la humanidad, pero en el fondo, así como lo has retratado, se podría convertir simplemente en una virtud, como lo es la actuación, que también es una mentira hecha profesión.... un beso gigante
LA MENTIRA ES UNA REAL FALSEDAD. EXCELENTE PLANTEAMIENTO.
ResponderEliminarUN ABRAZO
La mentira es la única compañera que dura toda la vida para algunos incautos...
ResponderEliminarSaludos
J.
Esilleviana,
ResponderEliminarNo me vengas con esas. Más de un problema me ha traído ser franco contigo, no mentirte con tus escritos y tus desvarios. No sé quién te la ha jugado esta vez, pero te has contenido un poco y hasta te ha salido bonita la cosa.
Abrazo fuerte
ResponderEliminarEscarbando en esas maletas podríamos encontrar lo que no somos... de tanto que nos engañamos.
· un abrazo
· CR · & · LMA ·