Guillermo Roux. Nocturnos |
Durante aquellas noches insólitas, la única solución ante el eco de voz destemplada que continuamente escuchaba en la oscuridad era la posibilidad barajar sueños con materiales reales que se transfiguraban en la nebulosa de la nueva realidad. La angustia inicial de aquel desvelo se fue distorsionando frente a la imagen de las ollas abolladas y desordenadas sobre la cocina de gas mientras brillaban en la negrura de la madrugada. Noche tras noche concebía diferentes dibujos que le ayudaban a franquear el paso hacia la búsqueda de cierto sentido común en presencia de todos los objetos desconocidos. Las horas más borrosas avivaban el boceto de la pequeña tetera con asa de madera, el cucharón y el escurridor repleto de loza limpia de la última cena. Los dibujos se sucedían entre tiestos y búcaros con alegrías guineanas dispuestos sobre un plato blanquecino en la penumbra de las débiles sombras, así como entre un juego de copas encima de un tapete de ganchillo en su mesa camilla. El poder hipnótico de las escenas se repetía cada noche en blanco y las pinturas alargaban sus visiones en distintas figuras encarnadas en todo un juego de té encima de una bandeja de plata y un tomate dentro de una de las tazas. Y así fue haciendo suyo cada uno de los enseres domésticos que encontraba en la casa, descubriendo sartenes, cafeteras, azucareros, vasos, cucharas, hasta que el cansancio regresaba, suavizando el despabilo llegando a conciliar de nuevo el sueño para crear una nueva forma de vivir.
El arte aparece en cualquier instante
ResponderEliminarMe recuerda tu texto aquella vieja película de dibujos animados de Disney, no recuerdo el titulo, en donde el ratón interpretaba una música magistral con todos esos enseres de cocina y una escoba, de repente todo ello me ha venido a la mente dejándome con una sonrisa amplia... :)
ResponderEliminarBesos y salud
Muy platónico. Mito de la caverna 2.0. El esclavo del siglo XXI.
ResponderEliminarEn otros momentos quizá pintaría una pequeña tetera parlanchina con asa de madera yo también pero como en estos días me vuelvo muy prosáica y práctica delante del derroche de platos y cacerolas, mi reacción es: "¡todo al lavavajillas y a dormir mecida por su música!" :D
ResponderEliminarUn abrazote envuelto en una pompita de Mistol o Fairy (fairy lights o fairy tales (elige) ;)
Ando espeso y con sueño, perooooooooo, ¿acaso se levantó a fregar en la madrugada? O era una fiesta y la última botella que descorchó fue la del Fairy, jajajajajajaja...
ResponderEliminarLuego vuelvo y lo leo pelín más despierto.
Toda cosa tiene su encanto, solo depende del punto vista de cada uno. Aprovecho para dejarte un abrazote y desearte un espectacular 2014.
ResponderEliminarTodavía anda por ahí una chocolatera con asa de madera...
ResponderEliminarParece un homenaje a Guillermo Roux, lindo.
ResponderEliminarAbrazote
Hay veces en la vida en las que tenemos que poner un punto y aparte y comenzar de nuevo. La dificultad está, en que a pesar de "reiniciarse" uno, lo cotidiano sigue estando ahí, quizá para recordarnos lo que quedó atrás.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu participación en la IV edición de haiku y por tu crítica aportación.
Bss.
Contar ovejas, dialogar con las sombras, o redescubrir los enseres domésticos... todo es válido para el esfumino nocturno.
ResponderEliminarBss
Me ha gustado, como de pronto, hay cosas que cobran vida, elementos cotidianos que dejaron de ser inanimados. Siempre sospeché que algo así ocurría durante la noche... aún pienso que puede ser cierto.
ResponderEliminarBesos y muchas felicidades!
Una copa con falda de bailarina, da tres giros sobre la mesa y brinda por el año que está a punto de comenzar! Salud!
Gaby*
la imaginación da para mucho...me gustó volver y leerte!
ResponderEliminarUn beso
En el territorio de la noche, cuando los sueños tardan en llegar y la mente vaga libre por extensas praderas, todo puede ocurrir...
ResponderEliminarHasta cantarle la "piedra libre" al tomate oculto en la taza!
Besos!
Festejo con un jarro de café, el despertar cada mañana del próximo año, con la paz bullanguera de lo cotidiano.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo a tus palabras, que siempre me despiertan la inquietud renovada de lo cotidiano y de o que no lo es.
Surrealismo o realismo??...Dibujar con palabras lo que en sueños puede sentirse o palparse.
ResponderEliminarMis mejores deseos para el próximo año, sobre todo...¡salud!.
Un saludo, Esi
amanece cada día. La luz nos trae oportunidades únicas de mejorar. No existen los errores
ResponderEliminarLa magia está en los objetos, ellos hacen que veamos a las personas manipulando dentro de las hojas de los libros, apoyan las imágenes que queremos crear, completan los dibujos en cuartillas blancas, están entre las palabras para dar aspecto real a tus fantasías.
ResponderEliminarUn millón de besos borrosos, amiga.
Las alacenas también tienen su encanto, te deseo que tengas un feliz año nuevo.
ResponderEliminarUn beso