El león rampante de su blasón sentimental no miraba de lado, con un solo ojo, a la dirección que se dirigían las varillas de pólvora que las bengalas emocionales lanzaba a su entendimiento. Sin darse cuenta, se había convertido en una de esas mujeres con muchas emociones y pocos sentimientos. Estaba convencida de que todo espíritu sensiblero es aterrador, como son brutales las pequeñas maniobras cotidianas que moderan el abandono o la desesperanza. Ante los demás, escondía celosamente los misterios de sus inquietantes conmociones: bajo temblores que alteraban los circuitos integrados del único soporte, cercano al pantano anímico en el que se reclinaba; en memorias destruidas catastróficamente borrando una pequeña parte de su personalidad; en una sima melancólica causada desde algún recodo de su cerebro; desde una capacidad perversa y calavera incapaz de desprenderse de sus vicios aunque ya no proporcione ningún placer. Sin embargo, había secuencias de lealtad conmovedoras en actos de servicio al funcionar en condiciones normales como cuando un niño cierra los ojos entre temblores y dentera para ejercitarse en el arte de ver lo insoportable. Al fin y al cabo, nadie le enseñó a esconder su rostro, girando la cara contra el muro del desinterés hasta desvivir tranquilamente.
Y en la mesa ya sentados sonreía
Para que no pensáramos que la habíamos perdido.
Yolanda Pantin
Los hay y las hay así, dificil saber por donde camina su corazón y su pensamiento.
ResponderEliminarBuena semana Esi.
Rediez!!!, qué triste y qué panorama tan desolador nos has pintado desde tu paleta de colores léxicos (el texto es rotundamente genial). A medida que leía me iba imaginando a una mujer de plástico con algunos chips (pocos) en la cabeza. No sé si ese fenómeno será o no numeroso (yo creo que no), pero suena a una de las cosecuencias de perder el paladar por las pequeñas cosas que hacen de la vida todo un regalo, para el corazón y para los sentidos. Siempre es mucho más bello, atractivo, cálido y sensual...el dedo que apunta a la luna que la luna misma (en el espacio sideral hace un frío de cojones)
ResponderEliminarEnhorabuena por el post, te has salido.
Y un besazo, hala
Desvivir, que palabra tan interesante e imposible a la vez, porque sin estar muerto ¿Como se puede desvivir? Solo, por tanto, puede ser una forma de expresión como desvivirse por alguien, cada vez me gusta mas esta palabra con las posibilidades que deja, enfocándola a dejar de vivir...
ResponderEliminarY fíjate que solo me he referido a una palabra de las muchas que has utilizado en otra preciosa entrada como lo sin todas las tuyas, aunque a veces no las entienda del todo, pero con esto, me conformo...
Besos y salud
algun dia aterrizará
ResponderEliminar¡Déjate llevar! (se inicia el nuevo "año")....carpe diem
ResponderEliminarSaludos
Tu prosa, como siempre: definitiva y distinta. Solo tu, serías capaz de explicar con palabras el laberinto de un cuadro abstracto de Zobel.
ResponderEliminarUn abrazo.
Encontrarse en un lugar que no te agrada, que no quieres mirar, que crees soportar, temblar, y mirar...
ResponderEliminarUfff!
Abrazote
El arte de ver lo insoportable...
ResponderEliminarDAGA CLAVADA EN EL CENTRO DEL PECHO.
Hay textos que se agradecen.
Éste es uno de ellos.
Beso.
Allí inalcanzable a ella misma.
ResponderEliminarSaludos.
En ocasiones las corazas que nos imponemos pesan demasiado, son armaduras contra lo inevitable, cuando se desbordan las emociones, naufraga el barco álmico.
ResponderEliminar¿Quien lleva en su barco todos los elementos para hacer frente a la tempestad?
Es un enigma.
Besos Esi.
Me encantó.
Que imaginación¡¡¡ mi enhorabuena por crear esta protagonista que encaja con esa imagen. Bárvaro¡¡¡
ResponderEliminarBesos muchos ♥♥♥
gusto tenerte en mi rincón
Somos despiadados con nosotros mismos, a veces nos cruzamos en nuestro propio camino poniéndole trampas al destino. De todos estos profundos desconsuelos solo quedan agujeros en el pecho y una sensación transida y caduca de haber desperdiciado nuestro tiempo. Así como la melancolía es una actitud, la alegría puede devolvernos a la vida, en cualquier momento...
ResponderEliminarCuando menos lo esperemos, así que más nos vale que andemos bien atentos.
besos
Muchas emociones y pocos sentimientos? deliciosamente contradictorio,...
ResponderEliminarMaravilloso. Avanza con el temblor leve del equilibrista en su cuerda, su mundo... Un abrazo.
ResponderEliminarCuando luchan sentimientos y raciocinio... puf... una coraza para escapar de la sensibilidad y "sus bengalas emocionales".
ResponderEliminar"ejercitarse en el arte de ver lo insoportable"...
Por mucho que duela, prefiero mirar siempre de frente y con los dos ojos bien abiertos para seguir luchando. Y duele.
Un abrazo
ResponderEliminarEl colofón es apoteósico.
¿cuántas veces nos sentamos así, para que la gente no crean que nos han perdido?
epur... estamos perdidos.
Sí... de Oporto a Santiago... unos 250 km.
· un abrazo
· CR · & · LMA ·
A veces, me dejas sin palabras.
ResponderEliminarTodo lo contrario de tu post anterior, desabrida y sorda ante las emociones, nada que ver.
ResponderEliminarUn beso
¿Cuanta gente habrá creado esa coraza que esconde sus verdaderos anhelos? ¿Cuantas personas viven una vida que no creen sea la suya?. ¿Que fue de aquellos sueños juveniles? ¿Quien es esa persona que refleja el espejo cuando peinan sus cabellos?
ResponderEliminarCreo que hay mucha gente por desgracia sintiendo algo parecido, lástima, solo hay una vida y merecemos disfrutarla.
Como siempre para quitarse el sombrero con tus escritos.
Un besazo.
...pequeñas maniobras cotidianas que moderan el abandono o la desesperanza...cuando un niño cierra los ojos entre temblores y dentera para ejercitarse en el arte de ver lo insoportable.
ResponderEliminarDices lo que quieres decir, es cierto, pero tienes material suficiente para contar una historia mundana, abriendo el plano, claro.
Besos
ResponderEliminarQue terrible convertirse en alguien de pocos sentimientos, entonces qué eres un ser aterrador, insensible.. Si, da miedo sobre todo tropezarse con alguien así y que pueda formar parte de tu vida.
Un saludo,
Me gusta esa frase" se había convertido en una de esas mujeres con muchas emociones y pocos sentimientos" y es que hay gente que lo confunde...
ResponderEliminarLos humanos hemos ido a lla Luna, o eso dicen, pero manejar las emociones...cada vez lo hacemos peor...
Besos
me pegó la frase de que hay mujeres con muchas emociones y pocos sentimientos.
ResponderEliminarMe dejó pensando y al desgranarla sentí que a veces me puedo incluir perfectamente entre una de ellas
beso
El león rampante abre las fauces y se traga todos los prejuicios...es lo que tiene.
ResponderEliminarBesitos, linda Esi.
lo que he leído me parece haberlo escrito con anticipación en alguna vieja entrada.... curiosidades que da la vida, cuando uno piensa que es el único que con la piedra se ha tropezado, sin haberse tomado la molestia de preguntarle a la piedra a cuantas personas ha logrado tirarlas abajo, la humanidad querida amiga, es sólo un pedazo de carne que se pudre con los mismos gusanos siempre, porque no existirán otros que se atrevan a engullirnos sin que terminen intoxicados.... excelente entrada como siempre, un beso
ResponderEliminarPARA SER FUERTES NO SE NECESITA PERDER SENSIBILIDAD. EXCELENTE TU PLANTEAMIENTO.
ResponderEliminarBESOS
Nunca hay que perder el sentimiento, es algo que surge de dentro, algo que delata que somos humanos. Me encanta cómo escribes. Un fuerte abrazo y feliz fin de semana.
ResponderEliminarA veces, nuestros pensamientos más importantes son los que contradicen nuestros sentimientos.
ResponderEliminarun abrazo
Qué bien escribes... abro la boca y la cierro cuando asimilo lo que he leído. Yo me identifico, ni yo misma me entiendo, casi nunca.
ResponderEliminarUn abrazo
Estoy desesperado. ¿Dónde está Larisa? ¿Por qué no me abre El Comonunca? dime Esilleviana
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